Un grupo de estudiantes y padres de Keller ISD están en contra de una política que, según dicen, está dirigida a estudiantes homosexuales y trans.
Y es que los líderes del distrito aprobaron por unanimidad el jueves por la noche una revisión que requiere notificación a los padres si un niño decide usar nombres o pronombres no asignados al nacer.
La junta aprobó una lista de revisiones de políticas, incluidos cambios en las pautas que establecen la "Identificación de estudiantes", que fueron criticadas por lo que algunos llamaron un objetivo contra los estudiantes homosexuales y queer. Varios estudiantes expresaron su decepción.
La política contenida en los libros dice que los educadores y otros empleados no promoverán ni exigirán el uso de pronombres inconsistentes con el sexo biológico de un estudiante en un certificado de nacimiento.
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La política revisada ahora continuará diciendo que los padres y tutores tienen derecho a ser consultados y pedir permiso antes de que un estudiante sea referido con un nombre diferente.
Además, los padres deben notificar por escrito si se puede llamar a un estudiante por un nombre o pronombre diferente.
“Yo y muchos otros estudiantes queer a quienes se supone que debes proteger estamos sufriendo debido a tus decisiones”, dijo un estudiante actual de Keller ISD durante la sesión.
Durante los comentarios públicos, otro estudiante dijo que la decisión pondría en peligro la unidad y la confianza entre los estudiantes y el personal.
Mary Anne Weatherred tiene adolescentes en el distrito. Ella comparte las preocupaciones de los estudiantes de que sus compañeros podrían ser “descubiertos” y enfrentar problemas en casa.
"No todas las familias son iguales y no todas las familias van a aceptar que los niños exploren su identidad de género y eso les hará una situación hogareña difícil", dijo Weatherred. "Encuentran que la escuela es un espacio donde pueden usar un nombre diferente, un pronombre diferente y descubrir quiénes son".
Marissa Bryce también tiene hijos en el distrito. Dijo que comprende las preocupaciones expresadas durante los comentarios públicos, pero apoya la revisión de la política.
“Creo que es un buen punto de partida. Los padres necesitan saber qué está pasando en su escuela, necesitan saber qué piensan sus hijos”, dijo Bryce.
La revisión es una continuación de una ordenanza introducida el año pasado.
