TEXAS - A tan solo dos días de que expire la orden de "quedarse en casa" emitida por el gobernador de Texas, Greg Abbott, la ciudad de Lancaster, ubicada al sur de Dallas, reportó su primera muerte por COVID-19.
La víctima es una joven de 17 años, estudiante de Lancaster High School, quien fue identificada por el distrito escolar como Jameela Dirrean-Emoni Barber.
De acuerdo con el comunicado, Barber falleció en un hospital local tras complicaciones por el coronavirus.
Autoridades le enviaron sus condolencias a la familia, y exhortaron a los residentes a que este 1 de mayo cuando se reabra el estado, en una primera fase, continúen con el distanciamiento social y las prácticas de lavarse constantemente las manos, al mismo tiempo que utilicen mascarillas.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció el lunes que la reapertura para incentivar la economía se haría en fases. En esta primera, los cines, restaurantes, centros comerciales y religiosos, podrán reabrir sus puertas.
Salones de belleza, gimnasios, bares, peluquerías y otros negocios no esenciales, deberán esperar, quizá hasta mediados de mayo cuando se evalúen los casos hasta ese entonces.
La decisión de Abbott ha generado muchas opiniones a favor y en contra, tal y como expresó el juez del condado Dallas, Clay Jenkins, durante una conferencia de prensa.
El condado Dallas reporta hasta el momento un total de 3,240 casos positivos, Y 94 muertes por COVID-19.
