Las celebraciones del 4 de julio terminaron en tragedia donde todo ocurrió en menos de 2 horas. Aquí te compartimos los detalles.
Además de las múltiples llamadas por la quema de juegos pirotécnicos que estan prohibidos en la ciudad de Fort Worth, la policía tuvo una noche intensa y mortal el 4 de julio y que continuó en la madrugada de hoy viernes.
Tres tiroteos provocaron pánico entre vecinos porque aseguraron que era prácticamente una lluvia de balas. En uno de ellos, dos niñas y un hombre murieron.
Los incidentes que continúan bajo investigación ocurrieron en áreas del este y sur de Fort Worth, y la policía de Fort Worth confirmó que los tres tiroteos ocurrieron con un lapso de menos de 2 horas entre sí.
La llamada al 911 por el primer tiroteo se realizó alrededor de las 11:30 p.m. el jueves en la cuadra 3700 de Castleman Street en el extremo sur del vecindario Stop Six en el este de Fort Worth, donde estaban congreadas unas 200 a 300 personas por la celebración del 4 de Julio.
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Los equipos de cámara de NBC 5 hablaron con los testigos en el lugar sobre lo sucedido. Dicen que la gente acababa de disfrutar de los fuegos artificiales del 4 de julio en las horas previas al tiroteo.
"Cuando regresé a mi casa, escuché lo que pensé que eran nuevos fuegos artificiales… Todos corrían y miraban hacia atrás", dijo Bobby Warner, quien presenció el tiroteo en Castleman Street. "Pero no vi ninguna luz". – no fueron los fuegos artificiales. La gente resultó herida hoy”.
Un hombre y una mujer murieron en este incidente.
A las 11:47 p. m., se escucharon disparos en Eastland Street, a pocas cuadras del tiroteo inicial. La policía de Fort Worth ha confirmado que este y el primero están conectados entre sí.
Luego ocurrió un tercer tiroteo alrededor de las 12:40 a.m. de hoy viernes en un lavado de autos en la cuadra 7500 de West Cleburne Road, en el extremo suroeste de Fort Worth.
En este lugar perdieron la vida Ivy Pierce de 4 años y Wynter Houston, de un año. Un hombre también murió. Otras personas fueron llevadas a un hospital con heridas que no ponen en riesgo sus vidas.
Durante el curso de la investigación, se determinó que el sospechoso también recibió un disparo durante este incidente.
El médico forense del condado de Tarrant determinará la forma, la causa de la muerte y la identidad del hombre.
"Mi corazón se rompe por las familias que se despiertan después del 4 de julio, un día destinado a la celebración, para lamentar la pérdida de vidas jóvenes a causa de crímenes sin sentido", dijo el jefe de policía de Fort Worth, Neil Noakes. "Compartimos su “dolor y seguir comprometidos a garantizar la seguridad y el bienestar de nuestra comunidad”.
El jefe policial agradeció a los residentes por su vigilancia y cooperación durante este tiempo. "Como siempre, instamos a la comunidad a informar actividades sospechosas. Si ves algo, di algo", dijo Noakes.
