Miguel Echeverría Zúñiga de 52 años y su hijo Miguel Echeverría Guizar se declararon culpables de operar una granja de marihuana en South Texas.
Las autoridades investigadoras señalaron que ambos hombres podrían enfrentar una sentencia de cadena perpetua en prisión y una fianza de hasta 10 millones de dólares.
Los fiscales en Brownsville dicen que el caso implica el descubrimiento de un campo de marihuana en el condado rural de Willacy.
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Loa agentes arrestaron a los Echeverría cuando intentaban huir. Diversos artículos encontrados en la granja ilegal presentaban huellas dactilares que corresponden con las de ambos hombres.
Recibos de venta ubicados en la escena también vinculan a el padre y el hijo con el delito por el que enfrentarán condena en julio.
Miguel Echeverría Zúñiga también se declaró culpable de ser ilegal después de haber sido deportado a México.
