Después de casi dos horas de comentarios por parte de residentes, la Corte de Comisionados en el condado de Tarrant votó a favor de eliminar un monumento dedicado a los soldados de guerra confederados y sus descendientes.
El monumento en cuestión se encuentra actualmente frente al histórico palacio de justicia en el centro de Fort Worth y fue erigido en 1953 por un grupo denominado Hijas Unidas de la Confederación.
La votación fue de 4 a 0 para la remoción y el comisionado J. D. Johnson del Recinto 4 se abstuvo de votar.
El comisionado Roy Brooks, del Precinto 1, instó a encontrar un lugar temporal para mantenerlo hasta que se pueda encontrar un lugar apropiado para mostrarlo con el contexto histórico adecuado.
"Esto no es un monumento a Estados Unidos, Es un monumento a quienes tomaron las armas contra Estados Unidos", dijo el comisionado Brooks.
Algunos de los comentarios públicos considerados por la corte se remitieron personalmente, mientras que otros se enviaron por teléfono o por escrito para ser leídos en nombre de sus remitentes.
El capellán Rich Stoglin, habló ante los comisionados argumentando que el monumento no debe ser removido. En entrevista con NBC 5, dijo que apoyaría agregarle contexto histórico o anotaciones, pero le preocupaba que la historia pudiera reescribirse con la eliminación.
"Este monumento no debe celebrarse, pero sirve como un recordatorio del dolor y la agonía que causó'', recalcó Stoglin a los comisionados.
El juez Whitley aclaró que el voto de quitar el monumento no significa que será destruido. En cambio, se mudaría a otro lugar que no sea propiedad pública en el condado de Tarrant.
No está claro exactamente cuándo podría eliminarse. El costo estimado no se conoce en este momento.