Anunció propuestas de sanciones más duras a quienes alteren el orden público.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció nuevas propuestas legislativas en materia de seguridad pública y para proteger a los policías texanos.
''La constitución garantiza el derecho a reunirse pacíficamente. La constitución no establece el derecho a alborotar, robar, saquear o iniciar incendios'', resalto Abbott.
En conferencia de prensa en Dallas, dijo que causar lesiones o destruir propiedad en un motín será un delito grave que conducirá a la cárcel. Golpear a un oficial de policía en un motín resultará en una sentencia de cárcel mínima obligatoria de al menos 6 meses, y esto incluye golpear a un oficial con objetos como ladrillos y botellas.
Incluso el uso de rayos láser para atacar a las fuerzas del orden será un delito que conducirá a la cárcel porque hay oficiales que terminado con lesiones en la vista por ellos.
Recordó que en los meses de mayo y junio se realizaron protestas pacíficas en esta zona, pero destacó que también hubo elementos perturbadores que saquearon propiedades y golpearon a la gente. ''Esto no se va a tolerar en Texas. En este estado no se va a permitir la violencia'', subrayó Abbott.
El mandatario estatal señaló que bloquear las entradas y salidas de los hospitales por parte dará lugar a penas de cárcel. De igual forma, el uso de fuegos artificiales en protestas y disturbios será un crimen que terminará con pena de prisión.
DIjo que las personas que instigan a disturbios con fondos o sistemas bien organizados, aunque no estén presentes, podrían recibir cargos y que habrá sanciones en el caso de organizaciones.
''Los criminales acusados de estos delitos deben permanecer en la cárcel al menos hasta su primera comparecencia judicial. Esto evitará que se burlen del arresto y salga por la puerta giratoria que vimos en Dallas a principios de este año. Y garantizará que estos peligrosos alborotadores no sean liberados de nuevo a las calles para participar en más disturbios sin haber tenido que comparecer primero ante el tribunal'', precisó el gobernador de Texas.
Agregó que ha tenido la oportunidad de reunirse con legisladores afroamericanos y que hay reformas que se trabajan para los departamentos policiales, mientras reconoció que no todos los policías tienen una conducta correcta.
Por otro lado criticó la medida de quitarle fondos a la policía de Dallas que ya no pagará tiempos extras. ''¿Entonces quién va a cuidar cuando haya protestas en Dallas? Es posible que no haya nadie'', puntualizó Abbott.
