UVALDE, Texas – Más de 20 oficiales permanecieron por casi 45 minutos en el pasillo fuera del salón de clases donde estaba atrincherado el atacante del tiroteo masivo en la Escuela Primaria Robb antes de ingresar al sitio y abatirlo.
En una conferencia de prensa este viernes, Steven McCraw, director del Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS), dijo que el oficial encargado de la respuesta policial consideró que el sospechoso, identificado como Salvador Ramos, estaba atrincherado y que los niños no estaban en riesgo.
Luego, los oficiales esperaron varios minutos antes de que se pudiera conseguir las llaves maestras para abrir una puerta. “Por supuesto que no fue la decisión correcta. Fue la decisión equivocada”, dijo McCraw, quien ofreció una cronología de la masacre y la respuesta policial.
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La masacre, que es el tiroteo escolar más mortal en la historia de Texas y uno de los más mortíferos en Estados Unidos, dejó al menos 19 niños y dos maestros muertos, y unas 17 personas heridas. El esposo de una de las maestras murió luego de una emergencia médica.
El director de DPS dijo que durante la masacre, cuatro niños llamaron al 911 para pedir ayudar de las autoridades. Dos de ellos murieron y los otros dos sobrevivieron, agregó.
El oficial reveló además que el autor de la masacre logró entrar por una puerta que había quedado abierta luego de que un maestro saliera por su celular.
McCraw dijo que hubo una lluvia de disparos poco después de que el autor ingresara al salón de clases donde lo mataron, pero que los disparos fueron “esporádicos” durante gran parte de los 48 minutos mientras los oficiales esperaban afuera del pasillo. Dijo que los investigadores no saben si los niños murieron durante esos 48 minutos o cuántos habrían perdido la vida.
En una actualización previa, el director regional de DPS, Víctor Escalón, reveló que el autor de la masacre ocurrida este 24 de mayo entró a la escuela a las 11:40 a.m. por una puerta que estaba abierta y sin ser confrontado por ningún elemento de seguridad.
Han aumentado las preguntas sobre la cantidad de tiempo que les tomó a los oficiales ingresar a la escuela para confrontar al pistolero.
CRONOLOGÍA DE LA MASACRE
Eran las 11:28 a. m. del martes cuando la camioneta Ford del sospechoso se estrelló contra una zanja detrás de la escuela primaria de Texas y el conductor saltó con un rifle estilo AR-15.
Doce minutos después de eso, dicen las autoridades, el joven de 18 años, ingresó a los pasillos de la Escuela Primaria Robb y se dirigió a un salón de clases de cuarto grado, donde mató a 19 estudiantes y dos maestros en un espasmo de violencia aún inexplicable.
Pero no fue hasta las 12:58 p.m. que los oficiales dijeron en una conversación por radio que habían matado al atacante y el asedio había terminado.
Lo que sucedió en esos 90 minutos ha alimentado la creciente ira y el escrutinio sobre la respuesta de las fuerzas del orden público al alboroto del martes.
Se espera que el gobernador Greg Abbott hable en una conferencia de prensa para las 3:30 p.m. en la Escuela Preparatoria Uvalde.
El gobernador Abbott afirmó el miércoles que la balacera no fue peor debido a la “rápida actuación” de los uniformados que enfrentaron al atacante de 18 años. Dijo que el adolescente no tenía antecedentes penales y las únicas señales de alarma que dio fueron varios mensajes que publicó en Facebook 30 minutos antes de la balacera.
Trascendió que el sospechoso compró legalmente dos rifles después de su cumpleaños 18, días antes del tiroteo.