HOUSTON – La administración del presidente Donald Trump acabará con la ayuda económica federal a 13 centros comunitarios donde se realizan pruebas de coronavirus, siete de los cuales están ubicados en Texas.
La ayuda solo irá hasta el 30 de este mes. Los otros seis centros que dejarán de percibir los fondos federales están ubicados en Illinois, Nueva Jersey, Colorado y Pensilvania.
La administración de Trump ya había intentado quitar la ayuda a estos centros en el mes de abril, pero la presión ejercida por congresistas de estos estados hizo que se reversara la decisión y se extendiera hasta este mes.
La idea del gobierno es que la ayuda a estos centros sea administrada por los estados o las administraciones locales.
En una comunicación enviada a Telemundo Houston, el zar de pruebas del gobierno Trump, el almirante Brett Giroir, negó que el gobierno federal estuviera quitando los recursos para ejecutar pruebas de COVID-19.
“Al contrario, hemos expandido los sitios de pruebas al pasar de los 41 originales, a más de 600 en 48 estados y el Distrito de Columbia”, dijo Giroir.
El almirante insistió en que a través del Departamento de Salud y Servicios Humanos, el gobierno federal incrementará la capacidad de hacer pruebas y las hará más accesibles a las comunidades menos favorecidas”.
Finalmente agregó que ya ha hablado con los gobernadores de los cinco estados involucrados, quienes se mostraron de acuerdo con la decisión.
La decisión ha generado polémica, más aún cuando el fin de semana el presidente Donald Trump manifestó que “le he pedido a mi gente que desacelere el ritmo de las pruebas”, ya que -según él- el hecho de que se muestre un mayor número de contagiados hace ver mal a su gobierno.
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