El gobierno del presidente Joe Biden está considerando formas de mantener disponible TikTok en Estados Unidos si sigue adelante con la prohibición que está programada para entrar en vigor el domingo, según tres personas familiarizadas con las discusiones.
“Los estadounidenses no deberían esperar ver TikTok prohibido repentinamente el domingo”, dijo un funcionario del gobierno, y agregó que los funcionarios están “explorando opciones” sobre cómo implementar la ley para que TikTok no desaparezca el domingo.
Si el gobierno sigue adelante con un plan de este tipo, significaría que la caída de la popular aplicación no definiría su último día completo en el cargo, y aplazaría el tema a Donald Trump, quien será investido el lunes.
Mike Waltz, el asesor de seguridad nacional entrante de Trump, dijo a Fox News el miércoles que Trump está listo para intervenir para preservar el acceso a la aplicación de video de propiedad china en el mercado estadounidense. Y Pam Bondi, su elección para fiscal general, se negó a comprometerse a hacer cumplir la prohibición cuando se le preguntó al respecto en su audiencia de confirmación en el Senado el miércoles.
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Las medidas representan esfuerzos paralelos de los presidentes rivales para eludir al Congreso y a la Corte Suprema, que está preparada para pronunciarse sobre la prohibición en cualquier momento.
Aun así, un funcionario de la Casa Blanca insistió en que no aplicar la prohibición, si se confirma, no es una opción.
“No estamos considerando aplazar la aplicación”, dijo el funcionario. “Estatutariamente, no creemos que tengamos la autoridad para hacerlo”.
Las posiciones de Biden y Trump son un cambio de rumbo con respecto a su apoyo anterior a la prohibición de TikTok.
El equipo de transición de Trump no respondió a las solicitudes de comentarios sobre el plan.
TikTok está considerando sus opciones, incluida la posibilidad de último momento de que deje de operar el domingo, aunque también podría permitir que la aplicación permanezca activa pero sin futuras actualizaciones y correcciones de errores.
La ley en cuestión requería que ByteDance, el propietario de TikTok con sede en China, se deshiciera de la empresa y encontrara un comprador externo que se hiciera cargo en un plazo de nueve meses. Esa ventana se cierra el domingo. La ley también le dio al presidente la autoridad para otorgar una extensión única de 90 días si hubiera un "progreso significativo" hacia la desinversión.
La medida se promulgó en nombre de la seguridad nacional, ya que los legisladores creían que los datos de los usuarios estadounidenses corrían el riesgo de verse comprometidos por China o que China podría influir en los estadounidenses al controlar el contenido en TikTok. TikTok, que ha dicho durante mucho tiempo que esas preocupaciones no tienen fundamento, y algunos de sus usuarios demandaron para bloquear la ley, desafiándola desde el punto de vista de la Primera Enmienda.
Sin una venta, un indulto para TikTok significaría que las preocupaciones de seguridad nacional, al menos por ahora, seguirían sin resolverse.
Apenas unos días antes de la posible prohibición, una multitud de usuarios estadounidenses de TikTok han descargado alternativas chinas que plantean problemas de seguridad similares.
Trump, que intentó y fracasó en su intento de implementar una prohibición durante su primer mandato, prometió durante la campaña electoral el año pasado "salvar TikTok". Biden convirtió la prohibición en ley como parte de una medida de $95,000 millones para proporcionar ayuda a Ucrania e Israel en abril. Pero ahora su Casa Blanca está buscando quitarle fuerza.
El representante Ro Khanna, demócrata por California, aliado de Biden desde hace mucho tiempo, se encuentra entre un pequeño grupo de legisladores que han apelado a la Casa Blanca y a la Corte Suprema para detener la prohibición.
"Tengo la esperanza de que el presidente Biden escuche a los millones de voces que no quieren que se apague la luz de esta aplicación", dijo Khanna. "Tiene el poder de extender el plazo para tratar de tener una solución que evite que la aplicación se cierre".
El senador Ed Markey, demócrata por Massachusetts, también dijo que ha transmitido sus preocupaciones a los funcionarios de la Casa Blanca y les ha pedido que retrasen la prohibición.
Dijo que respondieron que “lo tomarían en consideración”, pero no dieron una respuesta clara sobre lo que sucedería.
A fines del mes pasado, Trump presentó un escrito instando a la Corte Suprema a posponer la implementación de esa parte de la ley para que el presidente entrante pudiera “buscar una resolución negociada” para evitar el cierre de TikTok. El abogado de Trump, John Sauer, argumentó en el escrito que Trump “recibió un poderoso mandato electoral de los votantes estadounidenses para proteger los derechos de libertad de expresión de todos los estadounidenses, incluidos los 170 millones de estadounidenses que usan TikTok”.
Días después, Trump preguntó en su plataforma Truth Social: “¿Por qué querría deshacerme de TikTok?”.
Adjuntó un gráfico que muestra su amplio alcance en la aplicación de videos de formato corto, que afirma tener 170 millones de usuarios en Estados Unidos.
La semana pasada, los jueces de la Corte Suprema no parecieron convencidos por los argumentos de libertad de expresión de TikTok, aunque podrían decidir bloquear temporalmente la ley y, al mismo tiempo, fallar en contra de la empresa.
Durante los argumentos, el presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, señaló la conclusión del Congreso de que la empresa matriz de TikTok está sujeta a las leyes chinas que le exigen ayudar en la recopilación de inteligencia.
"Entonces, ¿se supone que debemos ignorar el hecho de que la empresa matriz en última instancia está, de hecho, sujeta a realizar trabajo de inteligencia para el gobierno chino?", preguntó.
Al abordar las preocupaciones sobre la libertad de expresión, Roberts dijo: "Al Congreso no le importa lo que hay en TikTok".
Los legisladores "no estaban diciendo que TikTok tiene que parar", agregó. "Están diciendo que China tiene que dejar de controlar TikTok".
Si bien la sede de TikTok en Asia está en Singapur, su empresa matriz, ByteDance, está en Beijing.
Algunos republicanos del Congreso que votaron a favor de la ley dijeron que esperan que Trump intervenga y negocie una venta a intereses estadounidenses una vez que asuma el cargo.
"Tienen que desinvertir por ley, por lo que Trump podría desempeñar un papel eficaz al encontrar un comprador. “Se considera un negociador de primer nivel”, dijo el representante Mike McCaul, republicano por Texas, un halcón en cuanto a China que fue presidente del Comité de Asuntos Exteriores cuando el Congreso aprobó la legislación el año pasado. “De lo contrario, supongo que cerrará a menos que pueda encontrar una manera de desinvertir en ella”.
“Muchos de estos influencers dependen de TikTok”, continuó. “No quieren cambiar, pero ByteDance está controlado desde Beijing. Simplemente no es una amenaza para el Congreso, sino para nuestros hijos”.
El senador John Kennedy, republicano por Louisiana, dijo que solo hay un camino para TikTok si quiere seguir operando en Estados Unidos: la desinversión.
“El Congreso ya aprobó el proyecto de ley”, dijo. “Lo que espero es que los propietarios de TikTok se presenten y digan: ‘Nunca compartiremos los datos de los estadounidenses con el Partido Comunista de China, y así es como se hará cumplir: desinvirtiendo de la empresa matriz’”.
Este artículo se publicó originalmente en inglés en NBC News. Haz clic aquí para leerlo.
