Miles de conductores llegaron tarde a su destino esta mañana tras una lluvia torrencial que impactó el condado Dallas e inundó un tramo de la 635 en ambas direcciones, aunque los carriles más afectados fueron hacia el oeste.
El caos vial se localizó a la altura de Garland Road y se extendió por varias horas hasta la I-30.
Varios conductores quedaron varados porque al agua les llegó hasta la ventanilla, y algunos intrépidos se arriegaron a cruzar sin problema por el carril exterior.
Pegasus Link, encargados del proyecto de ampliación (11 millas) de esta importante vialidad, dijeron que debido a los cambios de la alineación, en casos como este, hay inundaciones que empeoram debido a la basura y escombros que hay en la carretera.
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Pero la empresa de compromete a realizar revisiones frecuentes de los drenajes para evitar que esto vuelva a suceder.
Mientras, obreros colocaron una bomba para sacar el agua de este tramo.
La construcción de este proyecto finalizará hasta el 2025.
