Los residentes de Texas han votado y han decidido respaldar un gasto de dos billones de dólares en fondos de la reserva para ayudar al Estado a cumplir con las necesidades que necesitará la población que crece a pasos agigantados.
La propuesta electoral era una de las nuevas enmiendas que encabezaban la boleta y se esperaba su aprobación ya que contaba con el apoyo de los grupos ecologistas y de la mayoría de los altos funcionarios electos de Texas, incluyendo el republicano Rick Perry.
La propuesta número seis modificó la constitución de Texas para que transfirieran dos billones de dólares del llamado ¨Texas Rainy Day Fund¨ para un fondo que modificará y creará nueva infraestructura para el agua.
El dinero ayudaría a sufragar los costos de los prestamos en los proyectos de infraestructura de agua a gran escala, incluyendo la creación de embalses, tuberías nuevas, entre otros proyectos.
El Estado estima que necesitará $53 billones de dólares para implementar el plan que pueda estar al corriente con el rápido crecimiento de la población y la economía pujante de Texas en los próximos 50 años.
