Los robots llegan al restaurante: Mulán pide paso y llama “cariño” al cliente
Se llama Crensa y es un restaurante que abrió en el barrio valenciano de Benimaclet, pero con algo que le hace único en España: sus dos camareras son robots, responden al nombre de Mulán y sirven los pedidos con tanta educación como al pedir paso para llevar sus platos y llamar “cariño” al cliente.