Al final fue difícil saber que tenía más frustrado a Cristiano Ronaldo. El no poder anotar por segundo encuentro consecutivo en el Campeonato Europeo o tener que repeler los intentos de tomarse fotos con sus seguidores.
En lo que demostró ser un salvaje y posiblemente peligroso encuentro para el cinco veces mundialista, Ronaldo no anotó, firmó una asistencia y cuatro invasores de campo que intentaron tomarse selfies con el jugador acompañaron la caótica goleada 3-0 el sábado de Portugal ante Turquía para confirmar su boleto a los octavos de la Eurocopa.
Cristiano, uno de los jugadores más reconocidos y queridos del mundo, fue el centro de atención de Westfalenstadion. Pero no como seguramente le hubiera gustado.
“Ese es el precio que tienes que pagar por ser reconocido en el mundo del fútbol”, reconoció Bernardo Silva, compañero de Cristiano Ronaldo.
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En su 27ma aparición en la Euro, que es un récord, Cristiano asistió por primera vez en un gol en este torneo cuando asistió a Bruno Fernandes a los 55 minutos con un pase desinteresado frente al área chica.
“Fue un puro momento de fútbol portugués”, dijo el seleccionador portugués Roberto Martínez en reconocimiento de us capitán. “Debería mostrarse en cada academia de Portugal y el mundo debido a que demuestra que el equipo es lo más importante”.
Pero luego las cosas se tornaron un poco extrañas, e inseguras para la exestrella del Real Madrid, Manchester United y Juventus.
Entre los fans del futbolista, se destacó un niño que ingresó al terreno de juego para tomarse una selfie con el astro portugués, logrando cumplir su cometido.
Otra fan que se robó el show fue esta niña que no aguantó la emoción por tener a Cristiano cerca y conocerlo en persona, además de hacerle ojitos al futbolista durante la presentación y los himnos:
Cristiano Ronaldo no tuvo problemas posando para una fotografía con un joven aficionado que evadió a los guardias de seguridad para ingresar al campo a los 69 minutos. El fan se echó a correr antes de que lo tomaran y lo sacaran.
Pero Cristiano no estaba igual de contento cuando otros dos asistentes intentaron el mismo truco con sus teléfonos en los minutos finales del partido que se salió de control. Lanzó sus brazos al aire en desaprobación en la primera ocasión e intentó evitar al segundo al defender un tiro de esquina.
No está claro si los aficionados recibieron lo que buscaban antes de que se los llevaran los guardias de seguridad.
A menos de 28 minutos del inicio del juego y abajo por 1-0 de Bernardo Silva siete minutos antes, el central de Turquía Samet Akaydin pasó el balón hacia atrás y que pasó por el lado de portero y hacia el fondo de la portería.
Portugal sumó tras el triunfo en el primer duelo 2-1 ante la República Checa y clasificó con un juego por disputar en el Grupo F.
